El lugar se encuentra en una ubicación céntrica, con un restaurante fantástico a solo unos 10-15 minutos caminando, y las habitaciones son impecables, perfectas con agua embotellada de cortesía y magníficas vistas.

La ubicación era central y estupenda, muy cercana al puerto y a bares. La habitación era espaciosa, con un buen baño y vistas increíbles. El diseño interior era bonito.

Su situación, decoración, comodidad, tranquilidad y facilidad de aparcamiento.

El tamaño del televisor y la inexistencia de un frigorífico y de mobiliario para colocar el equipaje.

Tenía una ubicación estupenda, con el St-Martin Harbor cerca del hotel. Había un mercado y una boutique justo a la salida del hotel.

qué estancia tan perfecta, no he tenido ningún inconveniente. un alojamiento impecable y maravilloso con una ubicación excelente muy, pero que muy cerca de bares y restaurantes, del puerto de transbordadores, de los principales restaurantes. personal increíblemente agradable, habitaciones de buen tamaño con un dormitorio, una gran vista y un aseo independiente. un desayuno más que suficiente con varias opciones de comida. tienen un parking privado en la propiedad también hay una piscina increíble para relajarse.

La habitación era muy espaciosa, con una vista maravillosa y preciosas vistas.

Excelente situación, con vista al mar, muy cerca del puerto, donde estan casi todos los reaturantes y el shopping.Todas las habitaciones dan al mar, por lo que no es imprescindible reservar en el segundo piso.Desayuno abundante y correcto. Personal agradable.

Problematico aparcar. El cafe de desayuno es muy malo para los que somos cafeteros.

Primero nos tiramos en el jet ski y fue una locura. Después, nos metimos en el kite surf y volamos como pájaros. Y para rematar, fuimos a pescar a pie y pillamos un montón. ¡Fue súper guay!

Solo le faltó un ambiente más marchoso para los jóvenes fiesteros como nosotros.

Las habitaciones en el Hotel Le Galion son únicas y están decoradas con mucho gusto. Me quedé fascinado por los detalles y la tranquilidad que transmiten. La decoración crea un ambiente acogedor y relajante, perfecto para descansar después de un día de exploración en Saint-Martin-de-Ré. Como adolescente, me encantó la vibra moderna y juvenil de la habitación.

Entiendo que esto es una opinión personal y otras personas podrían no tener ningún problema con eso.

Pasamos unos días geniales en el Hotel Le Galion. La ubicación es perfecta, con unas bonitas vistas al mar. El personal es muy amable y servicial. La habitación es funcional y espaciosa, con una cama y almohadas enormes. La comida del restaurante es deliciosa y el restaurante en general es excelente.

Ubicación muy cercana a la parada de autobús, restaurantes de calidad y el puerto. Habitación amplia y soleada con una vista maravillosa al mar. Camas muy cómodas y una piscina climatizada disponible.

Nos encantaron las habitaciones con vistas. El desayuno fue más que suficiente, con una variedad de bollería y pan fresco. La ubicación del hotel es excelente, cercano a la playa, restaurantes, bares y tiendas. Además, el hotel es fantástico y maravilloso, pasamos unos días perfectos y nos encantaría regresar.

Nos encantó el alojamiento en el Hotel Le Galion en Saint-Martin-de-Ré. Las habitaciones ofrecen unas vistas maravillosas y el personal fue muy amable, brindándonos consejos útiles sobre la ciudad. La ubicación del hotel cerca del puerto deportivo, del puerto y de excelentes restaurantes es inmejorable. Además, está a solo 10 minutos en coche de La Cible. Sin duda, recomendaríamos este lugar a nuestros amigos para disfrutar de una estancia en Saint-Martin-de-Ré.

Un fin de semana agradable en una isla maravillosa. Las habitaciones del hotel eran limpias y estaban bien decoradas, y la cama era muy cómoda. Además, el hotel ofrecía parking disponible, lo cual fue una gran ventaja. La ubicación del hotel era excelente, con vistas fantásticas y una ubicación privilegiada cerca de todo lo que quería ver y hacer durante mi estancia en la isla.

Hubo algunos aspectos negativos durante mi estancia. En primer lugar, no había aire acondicionado en las habitaciones, lo cual era un problema dado el calor sofocante.

Este lugar está cerca del mar y del centro; cenamos en La Sarrasine, a poca distancia, y disfrutamos de un desayuno generoso con muchas opciones.